
¿Qué significa ser el? León de la tribu de Judá¿Un título por el que se conocía a Jesucristo? Jesucristo se ganó el título de León de la tribu de Judá porque su familia (sus antepasados humanos) tenía orígenes en la tribu de Judá.
La primera mención de este título en la Biblia se encuentra en Apocalipsis 5:5: Jesucristo es descrito como el León de la tribu de Judá. Esto hace referencia a una profecía de Jacob: el Salvador vendría a través de sus descendientes. Cada uno de los hijos de Jacob nombró una tribu de Israel.
En este sentido, poco antes de morir, Jacob profetizó que el Salvador sería un león, reinando con poder supremo.
El león es conocido comúnmente como el rey de las bestias. Tiene la fuerza para dominar un territorio entero y es un animal poderoso en comparación con otros animales. Por ello, se ha convertido en símbolo de reyes.

Según la profecía de Jacob, a través de una tribu de Israel habría un reino eterno, verdaderamente perpetuado por Jesucristo.
Esto era cierto: las palabras, enseñanzas, lecciones y directrices cristianas son la verdadera manera de comportarse en comunión con Dios. Este "reinado" no era literal, así como el apodo de Jesús, "rey de la tribu de Judá", también era figurativo.
Por tener padres humanos, María y José, Jesús era descendiente del rey David, quien era originariamente de la tribu de Judá, como más tarde lo sería Jacob.
Según Filipenses 2:9-11, Jesucristo es el León de Judá porque tiene el poder y la fuerza para mantener un reino vigente hasta el día de hoy a través de todos los cristianos practicantes. De esta manera, Jesucristo también se ganó el título de "rey", pero en sentido figurado.
El significado de león en pasajes de la Biblia
A través de pasajes bíblicos, es posible comprender que el león representa fuerza y poder. Según Proverbios 28:1, el león no teme a nada, inspira respeto, es el rey de todos los animales y el animal más imponente de todo su territorio y más allá.
Sin embargo, el león no siempre se asocia con la realeza ni con significados positivos. Según 1 Pedro 5:8, el león también es un animal feroz y violento, que ataca a sus víctimas sin piedad. Una sola mordida basta para que el ataque de un león sea fatal.
Por eso el diablo es como un león, que quiere destruir a todos los seres humanos. En otros pasajes bíblicos, la figura del león, mediante sus ataques, también representa los castigos que Dios impone a los pecadores.
Sin embargo, el título de Jesucristo como León de la tribu de Judá no puede asociarse con los defectos e instintos de supervivencia del animal, sino sólo con sus aspectos positivos.
¿Cuál es la tribu de Judá?
La tribu de Judá era la más numerosa de las tribus de Israel. Sin embargo, también es necesario considerar la tribu de José, que tradicionalmente se divide entre las medias tribus de Efraín y Manasés.
En Números 1:26-27, la tribu de Judá tenía más de 70.000 miembros, lo que demuestra su importancia entre el pueblo de Israel.
La importancia y grandeza de la tribu de Judá también se aprecian en compilaciones posteriores de textos sagrados, como el Éxodo. Este ya era un período monárquico. Sin embargo, Judá era una población prominente entre las tribus israelitas.
En este sentido, a pesar de las discusiones sobre si todas las tribus de Israel llegaron emigrando de Egipto o si previamente eran poblaciones originarias de Palestina, la interpretación más sensata es que la tribu de Judá, junto con otras tribus israelitas, procedieron de Egipto.
Para ilustrar mejor la importancia de la tribu de Judá en la Biblia, es necesario referirse a algunos pasajes sagrados.
Tras la muerte de Josué, sucesor de Moisés y responsable de la emigración del pueblo de Israel en busca de la tierra prometida, el pueblo de Israel preguntó al Señor qué tribu ocuparía primero su territorio. La respuesta fue la tribu de Judá.
En este sentido, es posible percibir la importancia y grandeza de la tribu de Judá en el contexto bíblico, así como de los israelitas más importantes, quienes esperaban y profetizaban sobre la venida del Salvador como uno de sus descendientes, que era Jesucristo.
Por esta razón, Jesucristo fue alabado como rey tribal (en sentido figurado) y el León de la tribu de Judá, el Salvador largamente prometido por Dios, finalmente entre el pueblo de Israel. Todo esto formaba parte del plan de Dios para la venida de su Hijo unigénito.
Con gran fe y positividad, escribe para Pray and Faith, llevando mensajes y enseñanzas Divinas a todos.